Margarita: Una copa llena de magia
Andella Peralta//
Se preguntarán cómo será aquella musa que inspiró a dos hombres a crear uno de los cócteles más famosos de México. Aquí contamos su historia.
Soy una diva que nació en el maravilloso puerto encantado de Ensenada, en México. Me he dado a conocer en distintos países del mundo, soy famosa, deseada y dicen que tengo una personalidad muy refrescante. Dos hombres se disputaron por ser mi admirador secreto. Los rumores dicen que uno de ellos servía en el Bar Andaluz del hotel y casino Riviera, el otro en la cantina Hussong ‘s, antigua parada de diligencias. La verdad es que sigue siendo un misterio quién fue de ellos. ¡Ups! Que distraída soy, creo que olvide decir mi nombre, yo soy la famosa Margarita.
Cuando cae el atardecer y entra la brisa, me gusta pasar el rato en estos dos bares tan icónicos de Ensenada en donde compruebo cómo entran nuevas caras curiosas para conocerme. Y déjenme decirles que son foráneos en su mayoría. Todos se marchan contentos porque soy muy amistosa y encantadora. Además, el trato que reciben de los ensenadenses, que atienden estos locales, es muy cálido. También veo pasar por estas puertas algunas de mis viejas amistades de siempre. Vienen para seguir compartiendo conmigo anécdotas, bailes, risas, historias y muchas copas. Pero quiero seguir contándoles un poco más de mí y de estos dos bartenders que pelearon por mi amor. Así que vamos a adentrarnos en un pequeño viaje por mis dulces recuerdos de juventud para que me sigan conociendo y sepan de mis enamorados y del misterioso cóctel que representó.
Mi admirador del Bar Andaluz
-FLASHBACK-
26 de Agosto de 1948.
Era una noche llena de gente glamurosa en un ambiente alegre acompañados de la música orquestada por Xavier Cugat al son de un merengue. En una de las mesas se encontraba el señor Mario Moreno, que estaba alrededor de sus amigos interpretando su característico personaje “Cantinflas”, por el que era reconocido, por su manera tan pelicular de decir frases sin sentido, cantinfleando. Esa noche también se encontraba el bartender David Negrete preparando cócteles para los presentes que se encontraban en el bar.
David tenía ya dos meses que pasaba sus tardes preparando nuevas bebidas para al fin dar con una combinación perfecta con el licor de tequila. Mientras la noche de baile seguía y el lugar se llenaba, por esas puertas pasó la dama que se robó el corazón del señor Negrete.
La señorita Marjorie King Plant, quien era la dueña del Hotel Riviera del Pacifico, sitio donde se encontraba el Bar Andaluz en donde trabajaba el Señor Negrete.
Marjorie con mucha elegancia, pasaba entre las mesas saludando a sus huéspedes y con paso firme se acercó hasta la barra para pedir una bebida.
-Hola señorita King ¿Cómo se encuentra en esta noche?
-Hola David muy bien pero quiero distraerme un poco del ajetreo del hotel. Te quiero pedir un favor.
-Dígame señorita, en que puedo ser de ayuda.
-Quiero que me prepares una bebida que sea parecida a la Paloma, que tenga un suave sabor a tequila.
-Muy bien sus deseos son órdenes.
David recordó algunos de los ingredientes que estuvo mezclando meses pasados que tenían un muy buen sabor juntos. Comenzó agregando limón fresco, jarabe, tequila blanco y licor de naranja mezclado con hielo entero. Cuando terminó de combinar todos los líquidos pasó a escarchar el borde de la copa con limón y sal para finalmente verter la bebida que le había preparado especialmente a la mujer de quien estaba enamorado.
Marjorie tomó la copa y se deleitó con los frescos sabores que tenía aquel cóctel. Estaba tan fascinada que tenía curiosidad por conocer el nombre de esa bebida para poder seguir pidiéndola.
-David, ¿Cuál es el nombre de este exquisito cóctel?
El se quedó ensimismado buscando un nombre para darle a su creación. Entonces, se le ocurrió un buen nombre para la bebida que no solo le daría el reconocimiento sino con el que también podría profesar sus sentimientos secretos.
-El nombre de este cóctel es en honor a usted señorita, se llamará Margarita
Con un leve calor en sus mejillas, que se pintaron de un color carmín, agradeció la dama.
-FIN FLASHBACK-
¡Ah! ¡Qué hermoso recuerdo comparto con el señor Negrete! Esa fue una de las formas en las que él demostró su amor, creándome. Sin embargo, la señorita King nunca sospechó que era su admirador secreto.
En este hermoso bar que te traslada a las épocas de oro, fue inaugurado en 1930. Donde se destaca su arquitectura inspirada en España en el estilo colonial por sus candelabros, faroles y azulejos que decoran el lugar.
Detrás de la barra, hay un gran mural que exhibe un escenario romántico donde la música y el flamenco son palpables, que remonta a la cultura de Andalucía.
Sigue entrando y saliendo gente. Como les digo, mis amigos locales siempre vienen a deleitarse conmigo. Algunas veces está más concurrido y otras menos. Pero el día en que siempre vienen para que les platique este recuerdo es el miércoles. Soy tan especial para el Bar Andaluz que dedican especialmente un día para mí: La Margarita. Lo hacen orgullosamente por el rumor de la mítica historia de amor.
Siempre hay ojos curiosos que entran en este bar y cuando se dan la oportunidad de atreverse, me permiten contarles ese precioso recuerdo, contarles quién fue el señor Negrete, contarles el tiempo que tengo conviviendo con las personas de mi alrededor y contar un poco de mis célebres amistades que se me adelantaron en la vida, pero que estuvieron conmigo y bebimos juntos algunas copas en las mesas de este histórico lugar. Algunos otros ojos pizpiretos solo me admiran a lo lejos, se aprecia la curiosidad que les atraviesa. Quieren preguntarme y conocerme más pero se ponen nerviosos de que a mi lado se les olvide la prisa que tienen por regresar a sus casas. Algunos por eso se quedan sin la oportunidad de poder conocer a la diva Margarita que recorre por las barras de otros bares del mundo.
Mi pretendiente de la cantina Hussong’s
Ahora les contaré de mis noches en esta cantina más antigua de mi bello puerto y de todo el país fundada en 1892 por John Hussong en el que te puedes tomar unas cervezas acompañadas de unos cacahuates.
He sido testigo de cómo han pasado los años y muy pocas cosas han cambiado aún puedo ver las mismas clásicas puertas de las cantinas del viejo oeste y por fuera de la cantina aún se encuentran los postes en donde amarraban los caballos. Los jóvenes y adultos siguen entrando todos los días por estas puertas, como soy tan codiciada, hay largas filas porque quieren deleitarse con mi gran sabor.
-FLASHBACK-
Octubre de 1941.
Entraba una cálida luz que se filtraba por las ventanas e iluminaba los cuadros de fotografías y pinturas de algunos clientes frecuentes del lugar. Era una tarde tranquila en la cantina y en esa larga barra estaba sentado Ronald Reagan mientras que era atendido por Don Carlos Orozco. Como había poca clientela Carlos se dio el tiempo para crear combinaciones tratando de encontrar nuevas bebidas.
Recién terminaba una de esas mezclas, llegó una de sus puntuales visitantes. Una mujer que cada que iba pedir una copa robaba los suspiros del Señor Orozco. El nombre de la hermosa mujer era Margarita Henkel, la conocida hija del embajador alemán, que vivía en el Rancho Hamilton cercano a la ciudad.
El Señor Orozco le ofreció la bebida que recién había creado y que tenía tequila, licor de Damiana (planta endémica de la región) y jugo de limón, con un escarchado alrededor de la copa con limón y sal.
-¿Quisiera usted probar algo de mi creación?
-Claro que sí. Respondió halagada y que tomó el cóctel. Le dio un sorbo y quedó encantada por la refrescante combinación de sabores.
-Mmmm que delicia, ¿Cuál es el nombre de esta rica bebida?
-¿Cuál es su nombre bella dama?
-Margarita
-¡Atención amigos! Les presento mi nueva creación, alzando la voz entre los comensales: el cóctel que está bebiendo la señorita tendrá el nombre de esta preciosa musa, ¡Margarita!
La gente, eufórica, gritaba y aplaudía mientras la señorita Hamilton solo se reía y bajaba la mirada por la atención dada.
-FIN DEL FLASHBACK-
Al recordar esta historia siento como si estuviera una vez más sentada en uno de los bancos de esa barra, sonrojada por una de las muchas formas con las que el Señor Orozco me demostró su amor.
En esta cantina que te transporta al viejo oeste hay varios viajeros que vienen a preguntar por mí y más que nada a tomarnos varios tragos juntos. Así pasamos las noches divertidas, acompañados de la extravagante música del norteño con sus covers de las canciones de Pink Floyd.
Para la gente de mi mágico puerto soy tan querida e idolatrada, que no les basta con tener un día especial en el Bar Andaluz para La Margarita. Soy tan relevante que el 27 de agosto de cada año celebran un Festival en el Centro Social, Cívico y Cultural Riviera para conmemorar mi creación. Este año se celebró el 74 aniversario en donde me dejaron ser la protagonista. En estos festivales suele haber presentaciones musicales y culturales. Ese día hay mucha gente internacional. Se reúnen a mi alrededor, nos tomamos fotos y bailamos juntos.
Me despido queridos y queridas que acaba de entrar un cliente que desea un Margarita.