El movimiento Realfooding como alternativa a los productos ultraprocesasdos
María Foronda Mauleón @meeeri211//
Millones de personas siguen este estilo de vida creado por Carlos Ríos, que ha llegado para quedarse.
¿Qué es el realfooding?, ¿es realmente un movimiento beneficioso para la salud?, pero… ¿Es más caro comer sano? Estas son solo algunas de las preguntas que se hacen los ciudadanos a la hora de proponerse empezar con esta dieta innovadora. Es normal tener tantas dudas cuando es un movimiento que ha surgido de Internet, y promete crear un estilo de vida saludable para todos aquellos que se unan.
El realfooding es un movimiento social que surgió en las redes sociales en 2013, de la mano del padre y fundador Carlos Ríos. El joven nutricionista comenzó a hablar de comida real y productos ultraprocesados en su Instagram, donde cuenta con más de un millón y medio de seguidores. La idea de Carlos Ríos de mostrar esa comida real fue una iniciativa diferente e innovadora, ya que sugería seguir una dieta saludable al alcance de todos sus seguidores. Así, consiguió que todos aquellos que quisieran mejoraran su alimentación con recetas que él mismo publicaba para hacer más fácil la unión al realfooding, eso sí, sin obsesionarse. Carlos Ríos defiende que “la comida es un placer, no puede ser una condena para nosotros”. Ríos estudió Nutrición Humana y Dietética en la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla y es el fundador de la academia de Realfooding-Come Comida Real. Su disciplina es sincera: “cuanto menos productos ultraprocesados comamos, mejor salud tendremos”.

Carlos Ríos, creador del Realfooding. Vanitatis
El verdadero origen del realfooding
Aunque Ríos sea considerado el fundador del realfooding, ya se hablaba de este movimiento desde hace casi más de un siglo de la mano del doctor Weston A. Price. Antes de que esto se hiciera viral gracias a las redes sociales, ya se había defendido este tipo de alimentación basada en comida no procesada. El dentista Weston A. Price fue el precursor del realfooding en aquella época. Averiguó el motivo por el cual el ser humano tenía más caries dentales y los arcos deformados: se debía a deficiencias nutricionales.
Fue así como comenzó su estudio para confirmar si su teoría era cierta. Descubrió que las personas con una dentadura más recta y sana eran más comunes en los pueblos nativos, gracias a sus dietas tradicionales, ricas en propiedades alimenticias. Analizó estos alimentos que utilizaban los pueblos indígenas y descubrió que proporcionaban al menos cuatro veces más calcio y otros minerales. Por tanto, el doctor llegó a la conclusión de que los ciudadanos debían llevar una dieta más saludable, basada en productos naturales que no han sido procesados, ya que era muy favorecedor para la salud dental. Así lo indicó en su estudio.
Beneficios de una dieta saludable
¿El movimiento realfooding aporta gran cantidad de beneficios a nuestra salud? Así es. Comer comida real puede aportar muchos más beneficios de los que se puede llegar a imaginar.
El realfooding ayuda a evitar el sobrepeso —reduce el antojo de azúcar—, es un escudo frente a las enfermedades —evita la hipertensión o la diabetes— y contiene nutrientes naturales —los alimentos son muy nutritivos—. También fortalece el sistema inmune, reduce la sensación de hambre —aumenta el metabolismo y ayuda a la pérdida de peso—, y mejora el tránsito intestinal gracias a sus altos niveles de fibra. Para conocer más a fondo los beneficios de una dieta realfooding, Laura Bescós, una joven de 22 años, cuenta su experiencia con este tipo de alimentación: “Consiste en comer comida real y evitar los productos ultraprocesados, puesto que resultan adictivos porque su sabor es intenso. Además, de esta forma, no disfrutamos del sabor de la comida real”.
Laura lleva ya más de 6 meses siguiendo esta dieta saludable a través de la aplicación MyRealFood, en ella se encuentran infinidad de recetas y menús para que no sea complicado unirse a la comunidad realfooding. Además, cabe destacar que con la cámara del móvil es posible escanear el código de barras de cualquier alimento y que esta te diga si es bueno o malo.

Ejemplo de cómo es la aplicación MyRealFood. MyRealFood APP
Laura ha querido proponer un ejemplo de lo que come en un día, para demostrar que no es nada raro ni complicado comer comida real: “Para desayunar, tomo un yogur natural con copos de avena, plátano, anacardos y cacao puro. Después, el primer snack: un táper con macedonia —kiwi, manzana y pera—. Para comer, lentejas con verdura, ensalada mixta y de postre, naranja con nueces y canela. Luego viene el snack 2: dátiles y queso curado. Y para cenar, pollo al curry con verduras a la plancha —espárragos verdes, calabacín y berenjena—”. Con este menú, Laura quiere mostrar que la dieta realfooding no consiste en comer menos o menos cantidad en las comidas, al revés, se trata de hacer las cinco comidas diarias pero con productos de calidad.
Existe una parte de la población que no se atreve a comenzar con la dieta realfooding porque relacionan a la comida saludable con un mayor gasto. Esto se debe a que se confunde comida saludable o real, con comida ecológica. Estos productos que se venden en tiendas ecológicas tienden a ser más caros, ya que proceden de la agricultura ecológica con unos costes mayores. Sin embargo, muchos de estos productos ecológicos están muy procesados, así que no se deben confundir con la comida real de la que habla el realfooding. Cuando se refieren a comida real, quieren decir la que se vende en cualquier mercado o frutería. Estos alimentos no son más caros, son igual de asequibles que muchos de los productos ultraprocesados.
Por otro lado, comer comida real no solo se convierte en una simple dieta más, sino que termina siendo un estilo de vida. Por tanto, genera ciertos hábitos y costumbres que influyen en nuestra economía. Uno de ellos sería planificar las comidas y no desperdiciar alimentos. Esto es muy importante, ya que según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, en cada hogar de España se tiran 76 kilos de comida al año, lo que equivale a una media de 250 euros.
El realfooding intenta acabar con esto, al apostar por la planificación de las comidas y el aprovechar los alimentos no utilizados, por ejemplo, al introducirlos en la cena del día siguiente o como snack. La aplicación MyRealFood cuenta con un apartado sobre cómo reutilizar estos alimentos que han podido sobrar en algunas de las comidas o cenas. Es una iniciativa valiosa para intentar tirar la menor cantidad de alimentos posible.
La filosofía del realfooding apuesta por ir al supermercado con una lista cerrada de cosas que de verdad son necesarias. Así, se prescinde de comprar productos superfluos y gastar de más. Comer comida real no es caro, es más, con una buena planificación, aprovechar bien la comida y ser precisos al hacer la compra, es posible ahorrar mucho al cabo del año y, además, estar mucho más sanos.
Si quieres leer más sobre diferentes estilos de vida te dejamos por aquí un artículo sobre la dieta gluten free y otro sobre el veganismo y el vegetarianismo.