Va por vosotros
Este texto va por ti, joven de trece años que, mañana, lunes, tendrá que volver a escuchar la palabra “maricón” de labios de algún machito de instituto. También va por ti, madre, que no paras de llorar desde que tu hija te dijo hace dos días que era lesbiana. Y por ti, padre, que no dejas de pensar en lo que pudiste haber hecho mal. También va por ti, alumno de Primaria, que, aunque no te hayas dado cuenta, solo ves en tus libros parejas heterosexuales felices.
Y, por supuesto, por ti, Paula, por aguantar que mucha gente se refiera a ti como “la transexual” o “la que tiene rabo”. Por ti, Ronin, que, este enero, a los doce años, te quitaste la vida al no poder aguantar más los insultos de tus compañeros. Y por vosotros, Mojtar y Alí, que os ahorcaron en medio de la plaza central de Gogan, en Irán, delante de vuestras madres.
Lo sentimos en el alma, de verdad. Sentimos que viváis y hayáis tenido que vivir en sociedades en las que la masculinidad y la feminidad se confirmen machacando al que no se adhiere a la norma. Sentimos que los entornos en los que vivís o habéis vivido sean auténticos “Gran Hermanos del género”, en donde se escrute cada acción en busca de fallos que levanten la sospecha. Y, de verdad, sentimos que lo hetero siga siendo lo superior, lo bueno, lo correcto.
A los que ya no están, garantizarles que, desde Zero Grados, seguiremos visibilizando toda forma cultural que denuncie estas injusticias y eleve a arte todo lo que no sea confortable y transgreda la norma sexual y genérica. Y, con respecto a los que siguen aquí, pedir a las maricas locas que lo sean aún más; a las marimachos, que se corten más el pelo y se pongan todos los días camisas de cuadros, y a los y las transexuales, que griten a los cuatro vientos lo que son, lo que tuvieron y lo que tienen. Porque, aunque no lo parezca, el miedo de los que os insultan y pegan, el pánico que sienten al imaginar que se descubra lo poco “hombres” y “mujeres” que son, es mayor y más profundo que el que vosotros sentís por ellos.
Un año más, contra la homofobia, contra la transfobia, y por no quedarnos más veces helados por la ignorancia y la crueldad de unos pocos.