La cafetería cinéfila
Dani Calavera//
Nuestro experto en cine Dani Calavera nos trae su tradicional recopilación de los mejores títulos del 2020 escogidos por profesionales de los medios y comunicadores relevantes en redes sociales.
Breve introducción en la terraza, antes de entrar a la cafetería
Imagino que se preguntará por qué hemos escogido una de las portadas de » La Colmena» de Camilo José Cela como presentación. Espere a que entremos dentro de la cafetería y lo entenderá, lector@.
Vivimos una época difícil. El grito «Yo tengo razón y tú no» se ha visto incrementado, alimentado, desde que las redes sociales hicieron su aparición para hacer de éste su principal atributo de cara al público, al consumidor. La nueva arena del circo. De ahí que, personalmente, cada vez conteste más veces con un «¡Claro!» o con un «sí, sí, por supuesto», a una ofensa, insulto o invasión de contenido que no sea constructivo, de forma maleducada o no venga de alguien a quien respete o que forme parte de mi día a día. Resulta tremendamente gratificante, además, cuando los ofendidos te contestan con un «¿Pero has leído lo que te digo?», para volver a contestarles con un «sí, sí, por supuesto», o un «¡Claro!» acompañado de un último «Desde luego, ¿¡A dónde vamos a llegar!?».
La cosa cambia, por supuesto, cuando el interlocutor es educado. Algo que prácticamente todos somos. Cuando esto pasa, es genial. Abandonar la vanidad en pos del respeto y la camaradería. Te hace disfrutar de una conversación o discusión de la mejor forma que hay.
Creo que estas son las razones por las que «Esto sólo es una crítica, la última palabra, es vuestra», es mi frase al finalizar una de mis críticas antes en Heraldo y actualmente en Aragón Cultura, durante los últimos 5 años. Es mi forma de deciros «Ey… Si no opinas como yo, ¿Qué más da? Vamos a tomarnos una cerveza y relájate… Y pásame el tabaco anda, que quiero fumar».
Entremos en la cafetería
Nos recibe un ambiente típicamente navideño. Las paredes marrón oscuro emanan olor a café y una agradable tertulia que forma sinfonías de ensoñador y relajante murmullo, nos recibe con los brazos abiertos.
Mientras nos dirigimos a la primera de las mesas, le cuento lector@, que durante el último mes y como todos los años, les pregunto a algunos colegas en el arte de la comunicación en medios y redes sociales por su título predilecto del año. Este puede ser una serie o una película. Para ejemplo, su narrador, pues en el año 2017 ensalcé a la tercera temporada de Twin Peaks como lo mejor del año y al siguiente, incluí en tercer lugar a La maldición de Hill House.
Y sepa además, que como tantos otros, los habitantes de esta cafetería cinéfila forman parte de ese grupo de gente con la que gusta hablar y discutir. Es muy posible que hayan coincidido en más de un título entre ellos, pero eso no tiene por qué ser un inconveniente. ¡Al contrario! Denota gusto similar y además, podremos asistir a dos opiniones diferentes de un mismo tema.
¿Qué títulos habrán escogido nuestros invitados a la cafetería este año? Descubramos los elegidos por los integrantes de la primera mesa, en la que hablan de cine y series representantes culturales y cinéfilos de sus respectivos medios.
Mesa número 1. Medios de comunicación
Comencemos con la elegida por Roberto Sánchez, de Los Cines de Robersan, miembro de la ACA y Crítico de cine en La torre de Babel, Zaragoza. Os animo a seguir su trabajo.
- La elegida de Sánchez: Mank de David Fincher.
Fincher rueda en un luminoso blanco y negro, con dirección de foto de Erik Messerschmidt y guión de su padre Jack Fincher, rastreando con habilidad todos aquellos escenarios y situaciones que seguramente inspiraron a Herman J. Mankiewicz y contribuyeron a construir la espléndida historia del Ciudadano Kane / William Randolph Hearst. Mank es mostrado como alguien muy cercano a Hearst y a su «»protegida» Marion Davies. La relación con su esposa Sara, con su hermano Joseph L. Mankiewicz, con los otros guionistas y escritores de los estudios, con los magnates de la industria, mediante unos diálogos chispeantes y sólidos, quizás de los mejores del Hollywood reciente, nos permiten entender su situación de alcohólico autodestructivo pero que da su «do de pecho» en la que resultó ser, con la intervención de Welles, una de las obras cinematográficas más importantes de la historia del cine.
El resto de acompañantes a la mesa levantan su taza de café, asintiendo ante la exposición de Sánchez, que cede la palabra a Enrique Abenia, que junto a Carmen Puyó, forma una de las dos columnas de crítica cinematográfica escrita en Heraldo de Aragón. El periodista del que aprendí aquello tan acertado de «Hay que valorar a cada película en el campo en el que juega».
- La elegida de Abenia: Tenet de Cristopher Nolan.
Tenet constituye la gran película de 2020. A partir de elementos reconocibles (el ‘thriller’ de espionaje y la modulación de la cuestión temporal), Nolan construye un espectáculo complejo que genera inmersión y apabullla…
Breve y directo, Abenia da un trago a su café para después continuar. No puedo evitar interrumpirle: ¡Un momento Enrique, sólo podía escogerse un título!
A lo que Abenia me contesta con la educación que le caracteriza, que promete ser breve en su resumen del año. Un camarero que pasaba cerca casi derrama el champán que llevaba hacia la mesa de los Vips al sorprenderse por tal atrevimiento.
…Aunque no hay que olvidar títulos como ‘El faro’, ‘Under the skin’, ‘La famosa invasión de los osos en Sicilia’ o ‘Color out of space’. Y como ‘bonus’ aprovecho para reivindicar ‘Nación cautiva’, estupenda obra de ciencia ficción con discurso sociopolítico que pasó demasiado desapercibida.
Al escuchar el título de El Faro de Robert Eggers, salta entusiasmada, casi sin poder terminar su café, Marina Ballester, joven crítica de cine e integrante de la ECAM, Escuela de cinematografía de Madrid.
- La elegida de Ballester: El Faro de Robert Eggers.
Sin duda, una de las películas clave del 2020. Willem Dafoe y Robert Pattinson logran eclipsar la atención del espectador en una historia llena de claroscuros, de sombras y luces, donde el surrealismo embriaga y el misterio enajena. El día a día en una isla remota y crepuscular trastocará a ambos personajes hasta límites insospechados. Acertada la decisión de filmar en blanco y negro y en formato clásico, ya que la atmósfera se ve favorecida gracias a la temática y estética escogida.
Ambos personajes, representados con tonalidades oscuras como si de almas en pena se tratasen, desentonan con la ansiada luz cálida que se encuentra a lo alto de la torre. Una historia intimista y pletóricamente psicológica que dotará de total libertad al público a la hora de darle verosimilitud al relato, además de producirle más de un dolor de cabeza intentando desentrañar tanto simbolismo. El hombre ante su reflejo, el poder feroz del mar y la tenebrosidad son las piezas principales que sustentan este hipnótico film que no dejará a nadie indiferente.
El resto asiente, murmulla y opina al respecto. Cuando de repente, soltando su reciente libro sobre la mesa de forma alarmante y haciendo que más de uno se ponga sus gafas para ver la portada del mismo, que responde al título «Los Goonies nunca dicen muerto», Francisco Javier Millán asegura que va a ser el primero en ensalzar una serie como lo mejor de 2020. El camarero esta vez, ante tal afirmación, se lleva las manos a la cabeza alejándose indignado hacia la barra. Mientras tanto, el crítico de cine, productor, colaborador habitual en Aragón Radio y escritor, se bebe de un trago su café y suelta sin más:
- La elegida de Millán: Mandalorian.
T2 creada para tv por Jon Favreau. Varios directores. Para mí es el mayor acontecimiento que ha podido producirse en este aciago 2020. Si los primeros ocho capítulos del año anterior fueron una grata sorpresa para los fans de Star Wars, esta segunda tanda revalida con sobresaliente lo que solo se insinuaba en su presentación. Su magistral pulso, unido a la respetuosa devoción hacia lo que supone esta saga para muchos espectadores, la convierten en una pieza con entidad propia dentro de este universo.
A modo de valor añadido logra conectar con las raíces fundacionales que sirvieron de inspiración para George Lucas, véase por ejemplo los filmes del género western o las historias de samuráis de Akira Kurosawa. Y lo que es más importante, consigue una conexión con los espectadores como nunca se había visto en las últimas tres décadas. Jon Fravreau y Dave Filoni han alcanzo el más difícil todavía, la vinculación emocional muy similar a la que vivimos en aquella década dorada de los 80. Algo que los cineastas y realizadores televisivos actuales son incapaces ni de arañar.
Y ahora es cuando usted y yo, estimado lector@, nos acercamos a la siguiente mesa para dejar a nuestros cuatro colegas discutiendo sobre sus elegidas. De camino a ella nos cruzaremos de nuevo con el camarero indignado, pero no le haga caso. Créame, se indigna y protesta por todo. Haga como yo y sonríale al pasar. Es divertido ver cómo este gesto le cabrea aún más.
Mesa número 2. Redes Sociales
¡No, no, no. Por favor lector@, no se alarme! No abandone la cafetería. Confíe en mí y siéntese conmigo para disfrutar de un segundo café y escuchar lo que han de contarnos los integrantes de esta mesa en cuestión. Créame, en las redes sociales a veces conoce uno verdaderas maravillas y no sólo punzantes opiniones gritadas con ira y alarmantes faltas de ortografía… ¿Qué maravillas, pregunta usted? Por ejemplo, las maravillosas recopilaciones de anécdotas sobre el séptimo arte de Quentin Allen, que no ha querido desvelarnos su nombre real y prefiere seguir siendo conocido por su nombre en Facebook. Veamos qué tiene que contarnos el bueno de… (Bebo de mi taza y después hago comillas con mis dedos) «Quentin».
- La elegida de Allen: Mank de David Fincher.
En un 2020 tan nefasto como olvidable resulta muy satisfactorio que un cineasta como Fincher nos regale la que, en mi opinión, es la mejor película de este año. Sorprende agradablemente que ese director con aquella tendencia a la transgresión en los 90, con obras como “El Club de la Lucha” o “Seven”, nos sumerja ahora en las entrañas del Hollywood dorado con un estilo clásico y una puesta en escena arrebatadora desde un irresistible blanco y negro.
Pero Fincher no se limita a la estética sino que ahonda en una profunda reflexión que nos muestra un mensaje tristemente vigente. La creación de una obra como “Ciudadano Kane” supone la excusa ideal para retratar la decadencia del artista, donde la manipulación del poder se antepone al talento y las presiones políticas pueden acabar con el arte y la vida… y Herman Mankiewicz, nuestro particular antihéroe, lo sufre en sus propias carnes brillantemente encarnado por un Gary Oldman que ya se encuentra situado sobre el bien y el mal con un superlativo nivel interpretativo en plena madurez. “Mank” es mucho más que cine dentro del cine… trata sobre nuestra propia vida y las poderosas influencias que nos impiden ser libres.
La última frase nos ha hecho a ambos, narrador y lector, asentir afirmativamente. Justo en ese momento y corroborando varios de los argumentos de Allen, entra en escena otro integrante de la mesa, Alberto Lainez. Todo un animal en lo que a conocimientos cinematográficos se refiere y fiel defensor del mejor cine europeo, de hecho y gracias a él, mucha gente conoce títulos al leer sus recomendaciones, yo incluido. Veamos qué tiene que contarnos.
- La elegida de Lainez: Diamantes en bruto de los Hermanos Safdie.
Por esa Nueva York de los años 70 de películas como «Taxi Driver», «Cowboy de medianoche», «La semilla del diablo», «The French Connection» o «Marathon Man»; donde por sus calles transitaban personajes tan emblemáticos como Travis Bickle, Ratso o Popeye Doyle; uno podría encontrarse, perfectamente, en una esquina o cruzando un paso de cebra, con un hombre corpulento, de nariz grande, con chaqueta de cuero y gafas de sol. Uno de tantos en esa gran urbe que es Nueva York.
Su nombre: Howard Ratner, un comerciante judío que se gana la vida con su pequeño negocio de joyas. Una persona irritante, adicta al dinero y al juego, sin ética ni moral ninguna pero inteligente y muy perspicaz. La llegada a la ciudad de un misterioso ópalo llegado de algún lugar perdido de África desencadenará una serie de acontecimientos que le harán llegar al límite de sus posibilidades. Y es que la supervivencia en esta jungla de asfalto habitada por prestamistas, joyeros, matones, apostadores, ladrones o famosos buscando algún artilugio singular, se hace harto complicada. Dirigen los hermanos Safdie con pulso y buen nervio. Recomendable al cien por cien.
Desde luego, no deja un segundo de respiración… Y qué, pero qué bien de verdad, está Adam Sandler en esta joya.
Si me lo permitís… Interrumpe de repente un caballero sospechosamente parecido a Buster Keaton, serio pero con semblante sereno y familiar… A mí me gustaría volver a hablar de un film que ya se ha nombrado. Se trata de Larra, que en twitter, red en la que cuenta con miles de seguidores, responde al nick de @MoonwalkerLFC. Ya le advertí, lector, que podían repetirse títulos… ¿Pero y lo bien que está cuando se escuchan dos opiniones que advierten un mismo camino? Y más la opinión de este caballero cinéfilo.
- La elegida de Larra: El Faro de Robert Eggers.
Eggers se consagra con su segundo largometraje (tras la fantástica “The Witch”) como uno de los cineastas de vanguardia más importantes del mundo. “El Faro” es un elevado ejercicio de estilo en el que demuestra un talento inusual para conjugar fantasía con terror psicológico. También es una perfecta sintonía entre lo antiguo y lo nuevo. El realizador norteamericano toma como sus referencias el eco del cine de Bergman (“Persona”) y el expresionismo alemán de Robert Wiene o Murnau para su hermosa e hipnotizante fotografía en blanco y negro (obra de Jarin Blaschke), el simbolismo de Allan Poe, o la violencia de los mitos de Prometeo e Ícaro. Ideas encarnadas en sus únicos actores: Willem Dafoe y Robert Pattinson, enfrentados en un titánico duelo contra la locura y la soledad, obviado injustamente en las galas de premios. Una obra de arte fascinante a la que es obligatorio rendir nuestros sentidos.
Justo al terminar Larra su exposición, dejando con decisión su jarra de cerveza sobre la mesa, un joven que parece más dibujado que de carne y hueso, con gafas y sonrisa maliciosa, se dispone a comenzar su exposición, llenando de anarquía nuestra hasta ahora apacible velada. Lejos de incomodarme, aplaudo su intromisión y créame, si lo sigue en twitter, usted también lo hará. Se trata de «Andrés Trasado» que con nombre en clave a lo Austin Powers, este agitador cinéfilo y seriéfilo nato, triunfa en la cuenta gracias a su humor negro y punzante. Escuchémosle.
- La elegida de Trasado: Orígenes Secretos de David Galán Galindo.
No es exactamente una película sino un producto de Netflix. La obra parte de una premisa sencilla ¿Qué sucedería si los lectores de cómics fueran como las personas? Se trata de un film de género español, pero no es tan buena como para decir “Es tan buena que no parece española”. También pertenece al subgénero «Antonio Resines». Al ser una película dirigida por Netflix sufre de INCLUSIÓN FORZADA y por eso el personaje de señor gordo con barba lo interpreta una mujer, Paquita Salas concretamente.
La producción sufrió muchos contratiempos ya que el director, el guionista y el autor de la novela original en la que se basa discutieron mucho. Yo, como cualquier cinéfilo de verdad, prefiero la novela a la película. No la he leído. Pero la prefiero. Una cinta de superhéroes en la línea de «Batman y Robi» pero con fuertes influencias del post-neo-vintage más pulp del cine de arte y ensayo de la Bielorrusia de los primeros 70. Te gustará si eres lector de cómics o si tienes carencias culturales. Que viene a ser lo mismo.
Todos los asistentes ríen en cada una de las incorrecciones pronunciadas por Trasado, a lo que el invitado responde con una reverencia y acabando su cerveza. El camarero, sin embargo, insiste en echar a Trasado de la cafetería. Pero tranquilo, entre todos le explicamos que el arma principal de este «twittero» es el humor más negro e irreverente, que muchas veces es necesario… Aunque existan algunos que no lo toleren. El camarero lleva ya varios monóculos rotos en esta velada.
¡Por fin una producción española, al menos! pronuncia de forma pausada, sonriendo elegantemente, una señorita presente en la mesa que ha escuchado atentamente lo que sus colegas comunicadores opinaban. Se trata de Amaya Izaguirre, cuyo blog y cuenta sobre series y películas que goza de gran éxito podéis seguir en instagram: @sofamantaypeli. Veamos qué ha escogido Amaya, por cuya afirmación podemos imaginar que se trata de una producción… Patria.
- La elegida de Izaguirre: Patria creada para tv por Aitor Gabilondo.
Este año ha sido muy raro. Y eso se ha visto reflejado también en la pantalla y en los estrenos. Por ello, este año lo mejor que he visto no ha sido una película, si no una serie. Esa serie es Patria, la adaptación a la pequeña pantalla de la novela de F. Aramburu. Me alegra que HBO haya apostado por ella porque merece muchísimo la pena. Muchas veces España tiende a copiar el éxito extranjero… pero aquí tenemos una historia nuestra que funciona. Que tiene fuerza, que conmueve desde el primer episodio, que tiene unos actores espectaculares y que refleja a la perfección algo que, tristemente, nuestra sociedad ha vivido. Me ha sorprendido muy gratamente. Desde luego, aunque no seas de series, es algo que no te puedes perder.
Dos series que indiscutiblemente han tenido mucho éxito entre el público han asomado la cabeza en esta lista de lo mejor del año… Pero resulta genial, elegante y esperanzador a mi parecer, que hayan sido dos películas en blanco y negro las elegidas en dos ocasiones por cuatro de nuestros invitados, ¿No le parece?
Pero nos queda una última parada. La barra de la cafetería. Acompáñeme.
Mesa número 3. El taburete tenuemente iluminado en la barra
En ese taburete, apoyado sobre la barra con un café, nos espera un guionista y escritor. No se prodiga mucho en redes ni tampoco suele hablar en medios. Pero créame lector, quizá si lo hiciese todos los que estamos aquí no tendríamos de qué diablos hablar… Pero no se lo diga, es un tipo tan humilde como inteligente. Escuchemos la favorita del año de Carlos Mateos López.
- La elegida de Mateos: Estoy pensando en dejarlo de Charlie Kaufman.
Si uno lo piensa, la película es mucho más que una simple vuelta de tuerca al particular universo de Charlie Kaufman. Se trata de un verdadero cambio de punto de vista. Todo consiste en mover el sistema de referencia de nuestras fantasías desde su creador original a una de sus creaciones. Una experiencia emocional, inmersiva y verborreica de lo que somos, de nuestros anhelos más secretos, de nuestras grandezas y miserias. Y todo gracias a una interpretación tan arrebatadora como sincera por parte de una Jessie Buckley ensoñadora. Una pequeña obra de arte.
Breve y directo. ¿Le apetece más otro café o pasamos ya a la cerveza, estimado lector@?
Mesa número 4. Próximamente
Por supuesto hay muchos otros nombres a los que sigo, como por ejemplo Álvaro de Paz, un actor y escritor afincado en Madrid sin el cual apenas me enteraría de nada de actualidad cinematográfica. O la cuenta @contracrítica en instagram, toda una fuente de sinceridad… Pero ya habrá más ocasiones en las que repetir estos cafés y más años venideros de cine, ¿Verdad?…
¿Cómo dice? ¿Me pregunta por mi lista de escogidas del año? Bueno, compañer@… Déjeme que salga a fumar y cuando vuelva, se la comento. ¿Le parece?
Eso será en el próximo artículo para Zero Grados.
Gracias por el artículo