Annia Drawing: “Mi indignación me llevó a tomar los pinceles”
Texto y fotografías: Adriana López, Sofía Villa y Alejandra Porras//
Su exposición “No soy un disfraz’’ es una reacción a la polémica del Blackface

Llegamos al Instituto Francés de Zaragoza para contemplar la obra de una artista que no conocemos; salimos de él cautivadas por la fuerza que transmite. La exposición “No soy un disfraz” de la artista Annia Drawing es una reacción a la polémica del blackface, una costumbre de los blancos que consiste en pintarse la cara de negro, por ejemplo, para disfrazarse (como ocurre en la cabalgata de los Reyes Magos con Baltasar).
Está formada por cuadros de diferentes tamaños que tienen algo en común: en todos ellos aparecen mujeres afroamericanas. Las pinturas son atrevidas, con colores vivos que transmiten energía y positividad. Una de las paredes está formada por cuadros pequeños que constan de la imagen de una mujer y una frase al lado. Son frases inspiradoras y combativas escritas en francés que evidencian el movimiento afrofeminista al que pertenece Annia Drawing.
Cada cuadro tiene una historia pero la fusión de los cuerpos desnudos de las mujeres, sus expresiones faciales y corporales y los elementos singulares que las acompañan despiertan lo mismo en nosotras: inspiración y empoderamiento. En su página web explica que a las mujeres las llama «Afrospirits«. “Tienen universos en el pelo, tienen secretos que algunos de ustedes encontrarán”, cuenta.

Un pequeño cartel llama nuestra atención: “Los cuadros pequeños valen 15 euros y los grandes 45”. Los precios nos parecen mucho más bajos de lo que hubiésemos imaginado. Sin embargo, observamos que se trata de láminas que reproducen las obras originales. Al visitar su página web, descubrimos que los mismos cuadros están a la venta por 600 euros.
Dada esta diferencia de precio, nos decidimos a comprar una lámina cada una. Se trata de dos obras pequeñas donde, al lado de una mujer afroamericana, en uno puede leerse “Soit tu milites, soit tu consens” (O militas o consientes) y en otro “Ne jamais laisser personne minimiser ou banaliser vos souffrances” (Nunca dejes a nadie minimizar o banalizar tus sufrimientos).
La indignación, origen de “No soy un disfraz”
“La serie ‘No soy un disfraz’ nació en reacción a los problemas de identidad que sufren las mujeres negras por el color de su cabello y su piel”, reivindica Annia Drawing en su página web. Sin embargo, fue un hecho concreto el que le impulsó a llevarla a cabo: “Surgió después de ver una cara negra en Lyon titulada «Reina Banania». La autora había puesto en ella una peluca afro y mi indignación me llevó a tomar los pinceles”.
Annia Drawing basa sus obras en la exposición de sus convicciones, en el feminismo y en la igualdad entre todos los seres humanos. De madre ghanesa y de padre franco-suizo, las pinturas de esta artista presentan un imaginario atípico influido por esta mezcla cultural.
Poca repercusión
Antes de acudir a la exposición en el Instituto Francés, visitamos las redes sociales de Annia Drawing. Nos lamentamos por la poca repercusión en las mismas dado su enorme trabajo. No obstante, pensamos que esta exposición en Zaragoza es una buena oportunidad para darle más visibilidad.
